Insumos para la limpieza y tratamiento externo de heridas

El esquema de tratamiento considera el uso secuencial de dos productos que conforman parte de un sistema para un tratamiento más efectivo, en primer lugar limpiando la herida con CUPERSANclean® y luego tratándola con CUPERSANgel®; pero ambos productos pueden utilizarse en forma independiente de ser requerido.

Tratamiento combinado:  La irrigación de la ulcera con CUPERSANclean permite desprender con facilidad el tejido esfacelado favoreciendo la debridación mecánica, descontaminación y limpieza de la herida.

Aplicar una capa de CUPERSANgel, cubrir con gasa parafinada y luego cubrir con apósito.

CUPERSANgel le proporciona humedad al lecho de la herida otorgando condiciones ideales para que se mantenga limpia hasta la próxima curación y a diferencia de otros hidrogeles sin macerar los bordes de la ulcera.

Modo de uso CUPERSANclean

Seguir detalladamente las indicaciones de aplicación:

  1. Retirar la tapa del envase y el sello de seguridad.
  2. Insertar y atornillar el rociador adjunto.
  3. Anotar la fecha de apertura y utilizar el contenido las siguientes dos semanas.
  4. Descartar 3 aspersiones antes de utilizar CUPERSANclean sobre la herida.
  5. Aplicar abundantemente CUPERSANclean sobre la herida, y 5cm alrededor de ella.
  6. Cubrir la herida con gasa impregnada en CUPERSANclean. 
  7. Esperar 5 a 10 minutos, retirar la gasa, limpiar la superficie de la herida mediante arrastre mecánico con gasa, y repetir los pasos 5, 6 y 7 por segunda vez.
  8. Enjuagar con suero fisiológico, retirar el tejido esfacelado o necrótico y secar los bordes de la herida con gasa.
  9. Una vez la herida se encuentre completamente limpia y libre de tejido esfacelado o necrótico, continuar el tratamiento aplicando CUPERSANgel.

Modo de uso CUPERSANclean

Limpiar la herida y retirar POR COMPLETO el tejido esfacelado o necrótico previo a la aplicación de Cupersan Gel. Se recomienda el uso de Cupersan Clean para limpiar, descontaminar y desprender tejido esfacelado.

  1. Retirar la tapa del envase.
  2. Aplicar una capa de 5 mm de Cupersan Gel sobre la herida, o rellenar la úlcera hasta rebalse.
  3. Aplicar una capa fina de Cupersan Gel en el borde de la herida o úlcera y 2 cm a la redonda de ella.
  4. Cubrir la herida o úlcera con gasa parafinada procurando que sus bordes sobrepasen el tamaño de la herida o úlcera por un 1cm.
  5. Tapar la herida o úlcera con un apósito tradicional.
  6. Sujetar con una venda.
  7. Repetir el procedimiento según indicación del profesional tratante.
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